Una despedida que jamás estará a la altura de Iraia Iturregi: Crecer es ir quedándose cada día un poco más huérfanos
No se me dan bien las despedidas. Y eso que una, a base de años, daños, tropiezos y puertas giratorias, lleva a sus espaldas todo un catálogo de adioses y hastaluegos. Sin embargo, cada vez que alguien se va, queda ese vacío de pensar «y ahora qué». Ahora se supone […]