Sí, yo también me reí mucho con lo de Carlos Alsina y el Tour de Francia. Si ya han visto el vídeo, pueden saltar directamente al tercer párrafo.
Un honor haberme convertido en el meme del domingo en @tjcope 😂 https://t.co/0zcTSOOCz9
— Nacho Pla Pérez (@nachopla95) October 22, 2023
Resulta que el pasado domingo, en Tiempo de juego (Cope), el joven periodista Nacho Pla contó que Alsina, en sus años mozos, fue ciclista y de los buenos: «Esta semana he aprendido algo que no sé si sabe Heri [Frade, experto en ciclismo de la emisora]. Carlos Alsina, nuestro compi de Onda Cero, fue ciclista profesional y llegó a ganar la etapa reina del Tour de Francia». Las risas fueron instantáneas, y fueron en aumento al apreciar que Pla no estaba de guasa y empezaba a ser consciente del patinazo.
«Eso, Pla, lo hablamos el otro día y te dijimos que te la estaban colando», le advirtió Jorge Hevia, mientras Paco González comenzaba a llorar de risa. «Yo no podría poner mi vida en el fuego por ello pero estuvieron hablando de ello durante diez minutos», se defendía Pla. «Pon tu vida en el fuego, hazme caso, que te va a ir mejor», le aconsejó González; «Pero tío… ¿tú que oyes? ¿O cómo ibas cuando oías eso?»
Si alguna vez meto la pata de esta forma, me encantaría tener unos compañeros que me lo pusieran tan fácil como se lo pusieron a Pla los suyos. Y me gustaría, sobre todo, reaccionar con su naturalidad, propia del alma cándida que se necesita para creerse todo lo que contó. Una cosa sí era cierta: en Onda Cero se habían tirado diez minutos hablando sobre la trayectoria ciclista de Alsina.
Fue hace más de dos años, dentro de una sección titulada El programa que pudo haber sido, en la que Jorge Abad desvela a la audiencia de Más de uno cosas auténticamente sorprendentes de su director. La última, por ejemplo, se titula: «La razón por la que Alsina recibe tantos premios: extorsiona al Departamento de Postulantes». Entre las anteriores encontramos «Carlos Alsina se viste de superhéroe en More Than One: La película» y «Onda Cero Premium: servicio de radio personalizado por Alsina».
Escuchando los mencionados diez minutos sobre Alsina y la Grande Boucle —13:22 para ser precisos—, cuesta asimilar que nadie, y aún menos un periodista deportivo, pudiera dar crédito a esta especie de inocentada diáfana: «Yo era gregario porque siempre le tuve mucho cariño a Miguel», explicaba Alsina con evidente sorna; «él me decía que yo tenía méritos y aptitudes para liderar al equipo. Alguna vez tuve que sacar adelante a Miguel en etapas complicadas. Se me venía un poco abajo y tenía que tirar de él».
No se aprecia la menor intención de engañar al oyente, sino de buscar su complicidad. Todo eran banderas rojas, y especialmente el sketch en el que un imitador de José María García narraba el final de la presunta etapa y la victoria del gregario de lujo de Reynolds-Banesto. Pla ni siquiera sintió una perturbación en la fuerza cuando el falso Butano exclamó: «Coño, que se ha caído. ¡Vaya hostión que se ha pegao! Menos mal que ya había cruzado la línea de llegada».
No seré yo quien venga ahora a aguar la fiesta del buenrollismo viral de Cope. Ya hemos hablado muchas veces aquí sobre contrastar lo que se cuenta, pero es que además… ¡Pla lo comprobó! Se escuchó los diez minutos mientras las señales se iban sucediendo ante sus oídos una detrás de otra. Me pregunto dónde habría estado el límite de lo tragable.
Espero que, dentro de alguna semana, Pla se esté documentando para una nueva intervención y tropiece, por ejemplo, con algún viejo programa de Gomaespuma. Podemos imaginar cómo se lo contaría a Paco: «Sucedió en 1988. Según informó Luis Ricardo Borriquero, un pincho de tortilla se atrincheró en el banco central de Aletas de Frontera. Al ver que no deponía su actitud, la policía le gritó: «¡Salga con las patatas en alto!»
