A estas alturas ya sólo tengo una pregunta: ¿Cuántas veces más tendrán que explicarse las futbolistas para que algunos se queden satisfechos, para que por fin las entiendan? La respuesta la dio este domingo Alexia Putellas, que volvió a hablar junto a varias compañeras: «Quien no nos entiende es que no quiere entendernos». Y es así, tal cual. No es que ellas no lo estén contando -tres comunicados, dos ruedas de prensa- es que hay quien no las escucha y nunca tienen bastante porque han elegido, desde el primer minuto, no creerlas. El relato de la mujer como una exagerada demente, cucú, que saca las cosas de quicio y que después -no falla- deriva en la mujer pérfida y maquiavélica capaz de maniobrar en la oscuridad para arruinar la vida a esos pobrecitos hombres que ya no saben si pueden ceder el paso o decir un piropo porque dónde va a parar lo radicales que nos estamos poniendo las feministas, así no se puede seguir, esto es un sin dios, que a este paso vamos a destruir la hasta ahora idílica convivencia entre hombres y mujeres, es difícil de desterrar.
Por eso les seguirá dando igual que Alexia Putellas dé ejemplos concretos como viajar un día antes de un partido clasificatorio para la Eurocopa en un vuelo a las tres de la madrugada o que antes de enfrentarse a Inglaterra estuvieran seis horas en un autobús mientras que sus rivales lo hicieron en avión aunque sepan -deberían saberlo- que el descanso es una prioridad para una futbolista profesional, para una deportista de élite. Así que sospecho que ahora toca el «¿por qué no lo han dicho antes?» No les pareció suficiente que el viernes Alexia afirmara que habían sufrido una «discriminación sistemática» porque su punto de partida es dudar de su palabra, de su testimonio, de su experiencia. El foco volverá a desviarse para recelar y poner en entredicho sus verdaderas intenciones, por supuesto infames.
Y no, no hablo del acoso del ejército de trolls que en las últimas semanas cualquiera de nosotras, las periodistas deportivas con redes sociales, hemos sufrido con un mensaje en común porque ordenados son un rato: no habéis visto un partido de fútbol femenino en vuestra vida. El no sabemos, no tenemos ni idea, somos bobas, incapaces, enchufadas, encamadas, aprovechadas; unas inútiles. Y los colegas que reman a favor unos planchabragas alelados. Pero no, no me refiero a las pirañas, sino a los dinosaurios, a los periodistas y colaboradores en medios de comunicación nacionales con un altavoz gigantesco, estrellas mediáticas que durante el último mes siempre, siempre, siempre, han exigido a las futbolistas más detalles, más datos, fechas, nombres, más, más, más. Siempre más. Y nunca tienen suficiente. Los que no las quieren creer, los que no entienden porque no les da la puñetera gana. Porque es ideología, en fin, no ausencia de información.
Apunté desde el primer momento al machismo -cuando no misoginia- que también opera en los medios. Entornos hipermasculinos y masculinizados repletos de buenos tipos que continúan calificando de exagerado lo que está ocurriendo. Popes de la comunicación, con su manto de sabios, que hasta hace tres días seguían afirmando que el problema es de incompetencia, manzanas podridas, pero en ningún caso de machismo. Lo hice siendo plenamente consciente de lo que me esperaba -el silencio mayoritario por parte de mis «compañeros»- y a la vez totalmente inconsciente de lo que me iba a llegar: cientos de mensajes de mujeres en otros ámbitos fuera del periodismo deportivo que se habían visto reflejadas, a las que les había pasado exactamente lo mismo o algo muy parecido. En ningún momento viví la viralidad del artículo desde un lugar feliz, sino ansioso. Me dio miedo, pavor, la exposición; comprendí que mi montoncito de migajas iba a aumentar, que la aguafiestas intermitente se había convertido ya en una traidora oficial, que probablemente me había cerrado aún más puertas profesionales y rechacé propuestas de programas y gentuza que me dan mucho asco porque sólo querían más. Más nombres, detalles, datos, morbo. Más, más, más. Porque nunca tienen suficiente.
Cada paso, cada comunicado, cada palabra de las futbolistas me ha emocionado y tocado la tecla de las tripas. El clamor del se acabó, ya no lo soportamos más ni tenemos por qué aguantarlo ha retumbado en todo el mundo. Nos ha pasado a tantas, es tan universal, que precisamente por eso la reacción, la presión social, ha estado a la altura. Jamás me habría imaginado que la revolución iba a llegar del fútbol femenino detonando el sistema desde dentro. No hay que olvidar que cuando aún no había pasado ni lo de Rubiales en la final, Irene Paredes declaró en la previa: «La mayoría de las que estamos aquí hemos crecido pensando que este no era nuestro lugar, que el fútbol era un lugar que no nos pertenecía», reclamando así el espacio que se nos ha negado únicamente por carecer de testículos y señalando la injusticia general, no individual.
Todo lo que ha venido después ha sido un tsunami que nos ha dejado panza arriba y en el que nos hemos preocupado y ocupado de no dejar solas a las que dieron la voz de alarma, han liderado la revuelta y a las que han acosado, amenazado -no se podía percibir de ninguna otra manera la convocatoria de la Nations League- para hacerlas saber que estaban acompañadas y que era totalmente inaceptable que el Consejo Superior de Deportes las dejara a su suerte, siguiera sin protegerlas, hasta que Víctor Francos decidió ponerse manos a la obra y reunirse con ellas. Un principio, por fin. Uno obligado por las futbolistas que nos han removido a todas a pesar de la feroz resistencia de una estructura, un sistema patriarcal y misógino, que se resiste a caer y que ha contado con la inestimable ayuda de gran parte de los medios de comunicación que no lo entienden, que siguen sin entenderlo, que no lo entenderán porque así lo han decidido. Y que como los dinosaurios, terminarán extinguiéndose mientras piden más porque nunca tienen suficiente.
Excelente artículo. Hacen falta más así, poniendo luz donde antes había sombras. Todo mi apoyo
Contundente. Verdadero. Periodismo de verdad.
No han aclarado nada importante, que digan especificamente todos los motivos.
Si cuando todas las entendemos perfectamente y el que no se entera eres tú, no sé, igual tienes que plantearte que el imbécil eres tú.
A tí no tienen que responderte nada. Lo han hecho donde había que hacerlo.
Buenísimo artículo,y tienes toda la razón,cuesta mucho acabar con el patriarcado tan arraigado y el machismo incluidas muchas mujeres que son peores que muchos hombres ,muchas en medios públicos que quieren hacerte creer su opinión no lo que pasa realmente
Por fin se pone negro sobre blanco lo que los cenutrios no quiere entender.
Mi maximo respeto por Mapi Leon (mejor defensa española de laaargo) que sacrifico su Campeonato de Mundo por ser integra y no reblar ante una injusticia supina.
Mujeres y hombres como ella son las que cambian la historia.
Ahora si, periodismo del grande, grande.
Señora, mis respetos. Voy a compartir su artículo en mi Facebook , con su permiso.
La reacción de los machunos en general, era la esperada. Todos los días leo vómitos y diarreas mentales de especímenes que no saben ni escribir, pero que la poca alfabetización de la que hacen gala, la emplean con toda la violencia posible. Incluso aunque estas jugadoras ganasen otro Mundial, seguirían siendo para ellos unas niñatas manipuladoras, ávidas de dinero. Da mucha vergüenza ajena ver a las selecciones e hinchadas ajenas apoyar a nuestra selección, mientras que aquí se hacen los tontos, en el mejor de los casos. Ni las autoridades, ni sus homónimos, ni el grueso del periodismo español ha estado a la altura. Gracias de nuevo por su artículo.
Buen artículo, el camino y el cambio está marcado. Ahora mismo hay que seguir luchando por todos. Por mujeres, por hombres y por opiniones. Es maravilloso opinar diferente, en eso se basa una sociedad plural. Pero qué no nos callen nunca más.
El tema de fondo no es que haya algunas exigencias sensatas. El tema de fondo es que para reclamar cambios se ha usado como gema central un argumento donde un acto se cataloga como delictivo. Se ha ido a escoger una forma incorrecta, tanto con actitudes como con declaraciones contradictorias. Se ha visto imágenes que no cuadran con las denuncias y eso crea disonancias y es lo que mucha gente no entiende. Reitero: tanto en el relato como en las formas hay incongruencia. No ver esto es no querer enterarse de la realidad y mirarlo todo bajo un prisma ideologíado y demostrando una incapacidad notable para debatir y decir las cosas claras. Hay que abandonar las insinuaciones y/o declaraciones vagas que dejan solo volar la imaginación.
También hay otras exigencias inasumibles como cobrar un sueldo igual pero siendo una categoría que no genera el mismo nivel de negocio y que sobrevive pq está subvencionado. Es como si la banda de música de mi pueblo se queja porque no cobra ni es tratado igual que U2 o Madonna. Total todos hacen música! ¿no?
Este artículo llega a resultar algo ridículo porque la sociedad no cuestiona aquello que es razonable reclamar, sino que se crítica como se está haciendo y a costa de que. En un lucha que pretende ser legítima y justa tan importante es el fondo como las formas, y cuando se «fábrica» un caso mediático, la mucha o poca razón que se tenga, se acaba perdiendo. Es un tema de estrategia y lamentablemente se está haciendo mal.
Excelente comentario. De lo mejor que he leído sobre el tema, por encima de todo lo escrito en prensa y rrss y dicho en tv.
Ya se ha visto que el futbol femenino puede generar el mismo nivel de negocio. Otra cosa es que al patriarcado no le interese…..eso ya lo sabemos. A criticar todo el mundo se apunta; ¿estáis dispuestos a dar soluciones? O bien ¿os importa un pimiento porque lo único que queréis es tocar las narices? ¿Necesitáis que os nombremos todos los asuntos machirúlicos que sobreviven porque están subvencionados? A llorar a la llorería.
Es muy estimulante que salgan artículos así, que esas chicas son muy eficaces, eficientes y profesionales, si les damos el lugar que merecen, serán Campeonas olímpicas.
Ole por el artículo. Los compañeros masculinos, linos, linos, de comunicación deportiva penosos en su penar. Hay hombres que todavía no comprenden el daño de sus acciones, son ciegos a sí mismos.
Magnífico.
SIMPLEMENTE MAGNIFICO
Así como piensas de la selección femenina lo mismo estas pensando de tú madre de tu hija y de tu hermana todas ellas son unas planchabragas
Més clar, impossible! No has posat noms, però tothom sap de qui parles.
Dinosaures, no per grandesa, sí per anticuats i retrògrads.
Completamente de acuerdo con el articulo , haber si alguno de los q no entienden nada o no quiren entender comprenden la situacion de las mujeres en el futbol y demas
Gracias por abrir tus ventanas y exponer «la causa» abiertamente, sin cortinajes.
Sólo un «pero»: «el descanso es una prioridad para un/ una deportista de élite, pero también para cualquier trabajador /a ‘.
Gracias que bien si se hablar claro muy buen artículo.
Que diferencia con el fútbol masculino, después de todo lo que han pasado,sin entrenar ,de aquí para allá antes de un partido importante,varios días durmiendo 4horas …..y van estás mujeres y le ganan a Suecia en Su casa Gotemburgo;Suecia por si alguien no lo sabe es la selección número 1 del ranking FIFA.Son increíbles.
Excelente artículo, más claro imposible ! Lo entienden señores de mentes cerradas o siguen sin querer entender???
Me ha encantado, gracias gracias gracias
Muy bien, excelente artículo
De nuevo, muy lúcida. La semilla esta plantada y crece y ya no van a poder negar que tiene hojas y da sombra…
LAs futbolistas sí han hecho lo que los memos de los jugadores de la seleccion no han hecho nunca: saber jugar y ganar un campeonato del mundo y, paralelamente, denunciar, quejarse, crear una estrategia común y echar a directivos…y todo sin esconder su condicion sexual, por ejemplo.
Frente a ellas, siempre los recordamos a ellos: «El futbol es asi», «Yo de politica no hablo»,
«Lo que diga el mister»…..y ni un marica, oye, por ejemplo. La imagen mas grafica ha sido la de Morata leyendo como un escolar (por Dios, no habia otro?) tarde y mal, un papel que le pasaron sus jerifaltes…
Se acabó
Expctacular!!! Felicidades
Por fin alguien con el son de la tinta (virtual o física) es capaz d plasmar mis pensamientos. Gran artículo! Ni una coma, ni un punto le pongo o le quitó. Mi pensamiento reflejado en las palabras d otra.
Por fin alguien con el don de la tinta (virtual o física) es capaz d plasmar mis pensamientos. Gran artículo! Ni una coma, ni un punto le pongo o le quito Mi pensamiento reflejado en las palabras d otra.
Toma yaaaaaaaa
Viva el fútbol femenino
Enhorabuena por la claridad de exposiciones del artículo. Comparto plenamente lo que dices, y además, desde mi pequeño altavoz lo estoy viviendo. Estamos quienes no necesitábamos que fueran explicaciones porque sabíamos de qué hablaban, y quienes digan lo que digan, no las creerán. No hay más ciego que quien no quiere ver y eso es lo que está pasando. Estoy muy orgullosa de estas mujeres que están liderando una reivindicación general de todas, dentro y fuera del fútbol, dentro y fuera de los medios. Sólo nos queda apoyarlas y cerrar filas, porque nunca mejor dicho, su lucha, es una lucha global.
Que generan odio al hombre. Que son campeonas por un hombre como el entrenador Están manipulada por el feminismo los políticos de turno y los que nunca a trabajado en su puta vida.Vividores de la página.
El que se pica ajos come. No te molesta el feminismo, te molesta saber que eres machista.
Decir verdades, perder amistades. Gracias fenomenal
¿Habrá leido el artículo el tal Juanma Rodriguez después de lo que escribió hace un par de días sobre las jugadoras de la,selección insultos incluídos?.
Bravo por saber escribir tan bien y tan claro para que todo el mundo lo entienda!!
SE ACABÓ YA!!!
Lúcido y clarificador artículo, GRACIAS por dar en la diana.
Voy a seguir planchando bragas y calzoncillos y chopó por el articulo
Espléndido artículo. Muchas gracias.
No olvidar nunca lo que han hechos estas CAMPEONAS y apoyarlas siempre sin desfallecer.
Magnífico artículo. La dimensión que ha tomado esta situación injusta promovida por las jugadoras, será el principio de un cambio en las estructuras deportivas y a nivel general en la sociedad, aunque a algunos les parezca hoy una queja sin sentido.
Magnífico artículo, ya es hora de hablar así de clarito y no ocultar todo lo que pasa en esa federación de golfos machistas y muchas más cosas, y todo tapadito porque son marichulos y hay que hacer lo que ellos quieren siempre, se acabó, siempre con vosotras campeonas.
Sin lugar a dudas, nos han despertado, somos conscientes de todo lo que ocurre en nuestros espacios, trabajos, espacios y entornos diferentes.
Soy algo mayor…pero me doy cuenta que estuve dormida. Gracias, gracias y gracias por abrirme los ojos. Nunca es tarde.
Un artículo pensado al detalle, visualizando una realidad que no se hacía palpable porque todo está plagado de masculinidad, se abre el camino para las futuras generaciones de mujeres deportistas profesionales comprometidas con una pasión… el FÚTBOL en mayúsculas. Estáis escribiendo la historia!
No hacen falta más palabras, están todas y muy claritas.
Y a ellas ole ole y más ole, valen mucho y no tienen k demostrar nada más k todas nosotras y muchos, muchos de ellos lo sabemos. ARRIBA CHICAS
Es increíble que en vez de hablar de logros deportivos tengamos que hablar de derechos y de igualdades no respetadas, en mi cerebro no entra como puede haber diferencias entre personas por su sexo , su raza o por su situación económica, cuando el ser humano dejará de ser un animal, evolucionará y entenderá que somos personas, siento vergüenza, y desde ya tienen todo mi apoyo cualquier lucha que combata cualquier tipo de injusticia, discriminación o desigualdad, que el mismo ser humano inflinja a sus iguales, hoy toca a estas deportistas, pero en cada rincón de esta sociedad mal armada hay tanta injusticia como voces calladas, hoy toca gritarlas, espero ver con mi ojos o por lo menos mis hijos, una sociedad civilizada y justa.
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