Resultaba ciertamente cómico ver cómo se echaban el sábado por la noche con otro penalti marcado por Mbappe, lo que le convierte en el pichichi del Real Madrid. No solo eso, también tiene 4,95 expected goals, apuntaba As. Debería llevar un gol más en su haber con esa estadística.
Y luego está la realidad. El equipo de Ancelotti estuvo roto en San Sebastián. Pudo irse con una derrota contundente de no ser por dos penaltis que, independientemente de lo que se discuta en vares y demás, no se produjeron en jugadas que llevaran verdadero peligro.
La gestación de la sociedad entre Vinicius y el Mbappe se está cocinando a fuego lento y al que le queda camino por recorrer es precisamente al francés, que a lo que se enfrenta como 9 es a la alargada sombra de Benzemá.
El Madrid se enfrenta a equipos centrados en labores defensivas, que le exigen remangarse, combinar para sacar rivales del área y abrir algún espacio, pero su juego está muy lejos de descerrajar defensas. Hasta ahora, se ha visto más un embudo con tendencia al pase lateral y la jugada en solitario que dominio y criterio. El Stuttgart, que ha tenido un inicio irregular de liga, viene a confirmar, o no, la tendencia.
Sin embargo, de todo puede pasar con una plantilla como la del Real Madrid en manos de un Ancelotti que nunca ha perdido los nervios. No hay más que ver las últimas temporadas. Todavía queda mucha temporada. El problema no está ahí, lo que tiene un panorama muy oscuro en el Real Madrid son los más de mil millones invertidos en la reforma del estadio.
Se ha anunciado la suspensión de conciertos hasta abril. Cualquiera que siga la actualidad de la industria del deporte, sabrá que un estadio en propiedad en el que solo se disputan encuentros deportivos es un derroche económico o una pérdida de potencial impresionantes. El plan del Madrid de aprovechar el resto de días de la semana llenando el estadio con otras actividades comerciales es la evolución lógica del negocio.
Un plan sin fisuras hasta que alguien cayó en la cuenta de que alrededor del Bernabeu vivía gente. Se han suspendido los conciertos hasta primavera mientras se trabaja en una insonorización más eficaz. Cabe preguntarse qué hacía el Ayuntamiento cuando le presentaron el proyecto de reforma del estadio. Un consistorio tan atento al ruido que sale de cada bar que no está en manos de grandes empresarios, se olvidó de un recinto con capacidad para noventa mil personas en el centro de la ciudad.
¿Ningún técnico del Ayuntamiento vio que era inviable? Igual a veces se les pasan desapercibidos detalles en su propia ciudad, puede que estuviesen centrados en la crisis desatada por la correcta localización de una bolsa de escombros de la reforma de un piso y se les pasaran los 150.000 metros cuadrados del estadio. Si alguien quiere rodar una buena sitcom, solo tiene que seguir el guión del proyecto de obra en el Ayuntamiento. Una actuación hilarante de la que, por cierto no solo es responsable Almeida precisamente.
Mucho más interesante que el rendimiento de Mbappe va a ser cómo se resuelva esta crisis. Si el club logra dar con un juez afín, mucha imaginación va a tener que poner para que algo tan empírico, un número, como la medición de decibelios no sea la que es ni lo que es. Lo que está claro es que si la reforma del Bernabeu se queda sin el retorno económico esperado el agujero negro financiero puede ser un antes y un después. Este fin de semana ya había quien bromeaba con quemar el estadio y cobrar el seguro. Esta historia es la verdadera Champions de este año.
No se pueden hacer las cosas peor, desde luego. En bancarrota, teniendo que fingir lesiones para inscribir, malgastando el dinero en jugadores que se venden a los meses o que sobrepasan la treintena con sueldos crecientes y desproporcionados, inventándose palancas para poder competir con Tebas haciendo la vista gorda, teniendo a un socio capitalista a cargo del VAR para intentar ganar algo, habiendo pagado desde 1992 al vicepresidente del CNA (declarando que eran por informes ficticios, luego diciendo que para garantizar ecuanimidad y a la vez que era un pelele), colocando a un directivo en el CSD justo antes de que estalle para asegurarse la amnistía, … Florentino es un desastre.
Mbappe es el mejor del Madrid. En cuanto Vinicius sepa que tiene que juga en otra banda el Madrid volverá a ser temible. Además, jugando mal, ya lo dije Xabi tiene que venir, se sigue ganando.
Por favor, abstenerse paletos de opinar.
Bien haría Oriol M. Puig en preocuparse por el solar que es el Spotify y la inscripción de Olmo a 31 de diciembre en una sociedad en quiebra técnica que no sobreviviría sin ayudas de todo tipo. El mejor club de la historia con el mejor equipo del mundo no necesita de Orioles ni Puiges que se preocupen por un límite salarial que que casi triplica al del club de los Orioles y Puiges, rozando los 1000 millones de ingresos con una gran gestión. Ocúpese en sus artículos en la deuda que supera los 1000 millones de su club y en el resto de desmanes. Saludos sr. Puig. Pensaba que JotDown era otra cosa, pero voy de decepción en decepción. Habrá que dejar de comprarla y leerla.
JJjjapz…ya que te comes el madridismo sociologico, por qué no vendéis a Vinicius por 500 millones…jjjjaaazps…menuda panda de retraidos. O de deficiente que es el mismo.
Acabo de ver esto: Martín Pallín acusa al Madrid de «doparse con dinero público». No digo nada y lo digo todo.
Dile a la profe que te enseñe a redactar, cariño. Y no insultes, que está muy feo.
Bienvenido al mundo adulto Roy, o Floper, o Yo…algún día te ubicarás. Disfruta del club estado, yo he mandado dos cajas de cartón de huevos al Bernabeu para que los peguen en las paredes y lo insonoricen, mira si soy bueno.